El pez eléctrico
de las más altas latitudes
va abriendo surcos
en mi este
Porque no quiere oler morir
su sangre de sal
ahí va el pez enchufando su alma
a los secretos
de mi cierta profundidad
Tiene toda la grieta por delante
y sus glóbulos rojos
al oeste
al tiempo imberbe
Me tiene a mí
acunándolo
Cae la luz como lágrima
porque no quiere ver su nariz
rozando el espejismo de su muerte
Y el mar se sostiene enamorado
y el mar...
en sueños no hay firmeza
Hace 2 días.
4 comentarios:
Que no muera el pez, que siga acunado hasta su reencuentro con el mar enamorado.
Los peces no pueden morir, amiga, a veces se pierden pero siempre llega el tiempo de reencontrarse en y con el mar.
Gracias por la visita, un placer.
Muy sorpresiva su visita, señor Scalisto. El encanto de los encantos. La sonrisa de esta noche.
Gracias.
te estan pasando los años, y se te esta notando.
y esta bueno.
y a mi no me vengas con esa carita de sorpresa; en mi QuickNews estas un renglon abajo de Gibson, por una mera cuestion alfabetica.
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