eso,
leve bronce,
viga de agua, dulce y brutal lamiendo mis huesos
por un hilo de memoria
bajo un árbol que era su majestad
y al mismo tiempo abría los ojos
sólo para verme
oscura como cristal
con un corazón duro de eternidad
una palabra la boca muda
en un rincón de tierra
ignífuga
yo la veía cantar
bajo una lluvia dormida que erizaba el aire
- mientras
mi caída insípida
buscaba su tierno desvelo,
eso,
bordar las flores latentes
sólo para verme
en la espalda colores.
en sueños no hay firmeza
Hace 1 día.
5 comentarios:
Nadie es inmune al fuego, y mucho menos a sus acuarelados, piscica.
claaaaro, algo de esto te decía yo ayer en el teléfono...
:)
Brindo por tus lumínicas!
evangelio, usted es tan oportuno la mayoría de las veces... tengo ganas de darle un abrazo.
flor, su voz en el teléfono ayudó a evacuar :-) gracias por brindar. los moretones ya se irán diluyendo.
la tierra es ignífuga como el fuego?
los tres últimos versos, me gustaría comprarlos, no sé, tenerlos. son maravillosos.
gracias píscica!
hipotermia, algo que se incendia se hace ignífugo, después de todo, ja.
no compre: yo le regalo. y para cuando la vea, también le regalo un biznikke.
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