domingo, noviembre 02, 2014

casa de barro

donde entra el sol
las palabras son hilos que construyen
y destruyen nuestra morada.
somos capaces de soportar el ardor del frío
incluso soñando en el mar de Kara,
pero el cielo se desvanece de todas maneras.
no es natural, me decía,
no es natural mientras caían las hojas amar así,
perder así el eje
y volver de pie a una isla,
bajo este árbol donde los ojos se recuperarán,
pero la noche ya no tiene cuerpo
y la noche es igual.
siento el techo curvo del barro que imaginé en tus manos
exacto sobre mi corazón,
un rayo infinito
que el peso de los días drenará.

1 comentario:

-> dijo...

"no es natural mientras caían las hojas amar así,
perder así el eje
y volver de pie a una isla"

me lo voy a tatuar.